Hablar de Navidad es hablar de comidas, de familia, de regalos… y, también, de canciones.
Los medios de comunicación, los comercios, los altavoces callejeros de las ferias o los trenecitos urbanos navideños nos rodean de melodías ya conocidas por todos, pero… ¿Hemos tenido curiosidad por saber algo más de la historia de cada uno de estos temas musicales?
Pedro Burzaco Ojeda, profesor de Historia de la Música en el Conservatori del Liceu, nos ayuda a elegir en la sección de Lectores Expertos no solo las mejores canciones para cantar en familia en estas fechas navideñas, sino también saber más sobre sus orígenes.
Canción religiosa en latín, incluida en el Liber Usualis católico preconciliar, pero de incierto origen. Fuentes documentales la datan entre los siglos XVII y XVIII y le otorgan tanto un origen portugués (nada menos que compuesta por el Rey Juan IV de Portugal) como un origen inglés.
Fuera cual fuese su origen, ha quedado como uno de las canciones más conocidas de la Navidad, pese a que el latín no esté ya, precisamente, en auge como lengua internacional
El segundo tema escogido por Pedro Burzaco Ojeda es ‘El Cant dels Ocells’. La canción tradicional catalana de origen remoto, ha reducido su uso actualmente a homenajes funerarios.
A algunos les podría sorprender que originalmente fuera un villancico navideño en el cual las aves reciben y cantan el nacimiento de Jesús. Tal vez más pueden ignorar que durante la Guerra de Sucesión (1701-1715) fue transformado el texto en alabanza del candidato austríaco, el Archiduque Carlos de Habsburgo, y utilizado como canto frente al otro candidato, el Borbón Felipe de Anjou.
De hecho, Carlos llegó al puerto Barcelona y residió como rey durante un tiempo en el Palau Reial, que se alzaba en lo que ahora conocemos como Pla de Palau junto a la Llotja de Mar