El cantante es el artista español con más premios Grammy y el noveno en tener su nombre en el suelo de la célebre calle de Los Ángeles
Actores de la gran y la pequeña pantalla, del teatro, directores de cine, cantantes, locutores… muchos de ellos tienen su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, en Los Ángeles, en reconocimiento a su labor a la industria del entretenimiento. El viernes 1 de octubre se destapó una nueva estrella, la 2.703, y fue para el cantante español con más premios Grammy de la historia, cuatro. Además de 24 Grammy latinos: Alejandro Sanz.
“Ojalá mis padres estuvieran vivos para verme este día”, dijo emocionado el cantante español minutos antes de desvelar su estrella, que se ubica en el 1750 de Vine Street, frente al edificio de Capitol Records.
La Cámara de Comercio de Hollywood, que es el organismo encargado de otorgar las famosas estrellas de cinco puntas, decidió dedicarle una a Sanz como uno de los músicos más influyentes del mundo hispano.
“Jamás soñé esto, porque no soy John Wayne”, bromeó Sanz, quien comenzó su discurso de agradecimiento en inglés pero pronto cambió al castellano, para contentar al más de un centenar de seguidores, que desde primera hora de la mañana se habían congregado en esta célebre calle de Los Ángeles para ver de cerca de su ídolo.
“Quiero agradecerle al niño que fui y que nunca se dio por vencido para soñar. Soñé con estar en un escenario, con dar conciertos y vivir de la música, pero nunca esto”, aseguró el cantante muy emocionado.
El madrileño de 52 años ha recibido numerosos reconocimientos internacionales en sus más de treinta años de carrera y doce álbumes de estudio, pero afirmó que su estrella del Paseo de la Fama es especial por “estar en lugar donde se crea la magia” y rodeada de “tantos talentos”.
“La música es lo mejor del mundo”, concluyó el autor de éxitos como Corazón partío tras dedicar la estrella a sus cuatro hijos hijos (Manuela, Alexander, Dylan y Alma), que no estuvieron presentes. Quien sí le acompañó fue su pareja actual, la artista cubana Rachel Valdés, y la actriz mexicana Yalitza Aparicio, que estuvo nominada al Oscat por Roma de Alfonso Cuarón, y que hizo de anfitriona de la ceremonia.
Alejandro Sanz es el noveno español con una estrella en Hollywood, después del artista de cine mudo Tony Moreno, los músicos José Iturbi y Xavier Cugat, los cantantes Julio Iglesias, Plácido Domingo y los actores Antonio Banderas, Penélope Cruz y Javier Bardem
El próximo 8 de octubre, Alejandro Sanz volverá a los escenarios, será en Chicago, en su primer concierto tras la pausa provocada por el coronavirus: “No sé si me voy a acordar, voy a tener que pedir a la gente que me ayude”, bromeó. Luego visitará Nueva York, Washington, Miami, Los Ángeles y El Paso (Texas), entre otras ciudades, para llevar las canciones de #ElDisco (2019) al público estadounidense.
Extraído:
LA VANGUARDIA